Los ayuntamientos de Baja California, están endeudados severamente, pero la nueva Ley de Deuda que se instrumentó a partir del 2015, obliga tanto gobiernos municipal y estatal salientes a cubrir sus deudas a corto plazo a más tardar el 31 de agosto, para que no les dejen cargos económicos a los nuevos gobiernos y así se puedan solventar gastos en pagos de aguinaldo. Esta ley se generó porque los gobiernos salientes cubrían su deuda a corto plazo al momento de entregar la administración, lo cual generaba que los gobiernos entrantes se encontraran sin fondos para cubrir gastos.
En el caso específico de Tijuana, es el municipio más endeudado del estado, pero también es una deuda considerada manejable por la cantidad de recursos que le son otorgados. Cada ayuntamiento tiene un margen de deuda del 10 % de sus recursos y actualmente Tijuana llega al 8%, es decir aunque es la ciudad que más debe del estado, todavía podría solicitar préstamos.
En lo que respecta a la capital del estado, no se ha ampliado la deuda toda vez que ya está endeudada hasta el cuello, no se tocó deuda debido a su inamovilidad, por lo que la única posibilidad en el congreso local fue respaldar un proyecto de ingresos donde por primera vez, se autorizó el pago del alumbrado público, con cargo a los usuarios. Ensenada y Tecate mantienen una situación económica complicada, ya que tienen una deuda con el Issstecali.
Las pasadas administraciones municipales heredaron grandes deudas a los actuales ayuntamientos y se poniendo en riesgo la prestación efectiva de los servicios a los ciudadanos, por ello la Ley de Deuda Publica será una herramienta óptima para el cumplimiento de los compromisos adquiridos por ayuntamientos y estado.
