El gobierno de Coahuila gastó más de 25 millones de pesos para comprar ocho camionetas blindadas durante sus primeros seis meses en el cargo, según muestran los registros públicos.
Según el sitio web de transparencia del gobierno estatal, la administración del Partido Revolucionario Institucional (PRI) liderada por Miguel Riquelme compró cuatro camionetas a prueba de balas de dos compañías distintas entre enero y mayo de este año.
Cada vehículo costó un promedio de 3.2 millones de pesos.
El diario El Universal informó hoy que la oficina del gobernador compró tres de los camionetas blindadas, que la Secretaría de Gobernación del estado compró dos y que la Procuraduría General, la Secretaría de Seguridad Pública y la Secretaría de Finanzas compraron uno cada uno.
El Universal solicitó detalles sobre los contratos de compra, pero la unidad de transparencia del gobierno se negó a suministrar la información sobre la base de que los vehículos fueron comprados para su uso por “funcionarios de primer nivel a cargo de tareas de seguridad pública”.
Sin embargo, el periódico señaló que el secretario de finanzas, que encabeza el departamento que recibió el más costoso de los ocho vehículos, no es responsable de ninguna obligación de seguridad pública.
Los registros públicos también muestran que la cantidad gastada en los vehículos blindados es mayor que la financiación del gobierno asignada a una variedad de áreas diferentes durante todo 2017.
El año pasado, el gobierno de Coahuila gastó 13.7 millones de pesos en ciencia y tecnología, 10.2 millones de pesos en transporte, 17.4 millones de pesos para pagar deuda y 17,5 millones de pesos en materiales y suministros de seguridad.
Sin embargo, un concejal de ciudadanos del sistema anticorrupción del estado dijo que la cantidad gastada en camionetas blindadas no es alta para un estado como Coahuila, aunque agregó que el gobierno aún debe explicar públicamente el gasto.
“No creo que esté mal. No lo sé . . . quién los está utilizando, pero creo que dadas las condiciones en el país, se requieren “, dijo Adolfo Von Bertrab Saracho.
“Estamos saliendo de un proceso electoral violento. . . Soy de la opinión de que todas las precauciones que se pueden tomar son válidas. Tiene que estar justificado, pero para un estado tan grande, atrapado en un problema nacional y estando en la frontera [de Estados Unidos], no es excesivo “.
Con información de Mexico News
