Corea del Norte enviará atletas y porristas a los Juegos Olímpicos de invierno del próximo mes en Corea del Sur luego de que los dos países finalizaran sus primeras conversaciones oficiales durante más de dos años.
El acuerdo representa un avance diplomático cauteloso después de meses de tensiones crecientes sobre el programa de armas nucleares de Pyongyang y también con la promesa de reabrir una línea directa militar y mantener conversaciones para reducir las posibilidades de que surja un conflicto debido a un accidente o error de cálculo
Corea del Sur dijo que Seúl levantaría temporalmente las sanciones para permitir que el Norte asista a los Juegos Pyeongchang, que se inaugurarán el 9 de febrero, y propuso que las dos Coreas marchen juntas durante las ceremonias de apertura y clausura. The North dijo que su delegación incluiría atletas, oficiales de alto rango, un equipo de animadores, artistas de arte, reporteros y espectadores.
El ministro de unificación de Corea del Sur, Cho Myoung-gyon, dijo que Seúl creía que “invitados del norte se unirían a muchos otros de todo el mundo” en Pyeongchang. “La gente tiene un fuerte deseo de que el Norte y el Sur avancen hacia la paz y la reconciliación”, dijo.
Sin embargo, Corea del Norte dijo que no discutiría sus armas nucleares en las próximas conversaciones con Seúl porque apuntaban solo a Estados Unidos, no a sus “hermanos” en Corea del Sur.
En una declaración conjunta después de 11 horas de conversaciones, hizo una “fuerte queja” después de que Seúl propusiera conversaciones para desnuclearizar la península de Corea. “Todas nuestras armas, incluidas las bombas atómicas, las bombas de hidrógeno y los misiles balísticos, están dirigidas solo a los Estados Unidos, no a nuestros hermanos, ni a China ni a Rusia”, dijo el comunicado.
“No se trata de una cuestión entre Corea del Norte y Corea del Sur, y plantear este problema causaría consecuencias negativas y los riesgos de convertir todos los buenos logros de hoy en día en nada”.
El ministerio de unificación del Sur dijo en una declaración separada: “Coordinaremos estrechamente con Estados Unidos, China, Japón y otros vecinos en este proceso”.
Con información de The Guardian
