TIJUANA, Baja California.- La salida inesperada para algunos de Ricardo Iván Carpio Sánchez de la Fiscalía General del Estado tomó por sorpresa a muchos, pero para otros era una crónica anunciada que desde hace meses se venía fraguando desde las entrañas del gobierno del estado.
De acuerdo a información obtenida por Primer Sistema de Noticias desde el pasado mes de abril el rompimiento se dio entre la mandataria estatal, Marina del Pilar Ávila Olmeda y el ahora ex fiscal Carpio Sánchez, esto por los nulos resultados en materia de seguridad y procuración de justicia obtenidos por el también abogado.
Los escándalos de los narcoagentes detenidos en Estados Unidos no abonaron en nada a la relación que tuvo un quiebre -dicen por ahí -cuando el fiscal se le reveló a la mandataria estatal a tal grado que ella misma aseguró a algunos medios de comunicación que a veces ni a ella le contestaba las llamadas.
Ricardo Iván Carpio Sánchez llegó a oídos de la gobernadora, gracias a la cercanía que tuvo en su momento con gobiernos panistas; su esposo Carlos Torres Torres habría sido quien impulso a la mandataria a elegir a Carpio Sánchez como su futuro secretario de seguridad.
Sin embargo los planes se vieron opacados cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador decidió que dicho puesto fuera para el también ahora ex titular de dicha dependencia, Gilberto Landeros Briseño.
Para lograr que Carpio Sánchez no quedara fuera de la jugada, decidió mover cielo, mar y tierra por no decir la ley para que pudiera entrar en perfil de fiscal.
Y fue así que la gobernadora envío la terna con Carpio Sánchez a la cabeza para que el Congreso votara en favor del elegido.
No obstante, todo dejó ser miel sobre hojuelas hace algunos meses, cuando de un momento a otro la relación tuvo sus primeros roces… entre los pasillos de la Fiscalía se rumoraba que el quebranto se dio cuando el ex fiscal decidió no seguir las ordenes de la mandataria estatal.
Pero la gota que derramó el vaso y que destapó la cloaca fue la intervención que tuvo el director de Primer Sistema de Noticias, Juan Arturo Salinas, en la mañanera de Andrés Manuel López Obrador, ahí denunció al fiscal por sus supuestos vínculos con el crimen organizado.
Ante esta denuncia, el mandatario federal anunció que visitaría Tijuana en próximas fechas para revisar el tema de la seguridad, fue cuando todo cambio, pues es bien sabido que con cada visita del presidente las reglas cambian para la gobernadora y en este caso para el titular de la institución.
Tras la renuncia de Carpio Sánchez, la mandataria estatal solo envío un breve comunicado donde informaba que enviaría una terna con sus tres opciones al Congreso del Estado para sustituir al ex fiscal, dicho escrito fue publicado 15 horas después de haber dado a conocer la salida del Ricardo Iván.
Varios nombres se han hecho sonar para ocupar el puesto, entre ellos la comisionada del Sistema Estatal Penitenciario, María Elena Andrade; el maestro Carlos Barbosa, el ex diputado Fernando Castro Trenti y por último el actual procurador General de Justicia del Estado de Baja California Sur, Daniel de la Rosa Anaya.
Con información de Carolina Vázquez
