TIJUANA, Baja California.- Tras varias denuncias de los residentes del fraccionamiento Cubillas sobre el deslizamiento de tierra en la calle Roble, el Gobierno del Estado por fin los volteó a ver y dio respuesta a las exigencias de las familias afectadas.
De acuerdo con Raúl Díaz de la Vega, quien es residente de la zona, en una reunión la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana reconoció que las constantes fugas de agua aceleraron el proceso de deslizamiento.
“Esto viene desde el 2020 cuando por una fuga de la CESPT comenzó a propiciarse el deslave y posteriormente vinieron las lluvias y empezó el deslave. Vino la pandemia y prácticamente la calle quedó inhabilitada”, aseveró.
En dicha reunión el Gobierno del Estado acordó con los vecinos construir una boca de tormenta y un muro de contención, sin embargo, aún no hay fecha de arranque.
En ese sentido, el presidente del Comité de Vecinos del fraccionamiento Cubillas, Ángel Morales, explicó que si bien están satisfechos con lo abordado en la reunión, seguirán insistiendo hasta que vean los resultados finales.
“Esto tiene un inicio y es que el pavimento empezó a sufrir y termina en la consecuencia de que el terreno fallo”, explicó
Pero la preocupación continúa para los vecinos afectados, ya que en el caso de la señora Isabel Guzmán, en caso de que no realicen rápidamente los trabajos, su casa sería la más perjudicada y Protección Civil no quiere etiquetar su vivienda
“Protección Civil me dice que no pasa nada, que mi casa no está en zona de riesgo; que si no me han llevado alguna hoja no está en zona de riesgo y les dije pero mira como está ahí, pero para él todo va caer en la calle”, puntualizó.
La señora Guzmán dijo temer perder su patrimonio si las autoridades no actúan rápido.
Con información de Carolina Vázquez.
