TENGA, una empresa japonesa que fabrica ayudas para la masturbación, está a punto de hacer historia en el espacio de una manera bastante inusual. Será la primera empresa para adultos en enviar un juguete sexual al espacio y en intentar recuperar parte de la carga útil, algo que podría ser una novedad para una empresa privada no estadounidense.
La misión fue financiada parcialmente por crowdfunding en el sitio web Campfire, recaudando ¥ 1,833,680 (16,642.13 dólares estadounidenses). El proyecto se realiza en colaboración con Interstellar Technologies (IST), una empresa de vuelos espaciales civiles que tiene como objetivo hacer el espacio más accesible al reducir los costos para poner material en órbita. Se espera que el lanzamiento se realice entre julio y agosto desde el puerto espacial de Hokkaido, dependiendo de las condiciones climáticas.
La misión se lanzará utilizando el propio cohete MOMO de IST, que está diseñado para entregar cargas útiles a una altitud de 100 kilómetros (62 millas), que es la altitud arbitraria donde se supone convencionalmente que comienza el espacio.
El Proyecto Cohete TENGA tiene tres objetivos. El primero es enviar 1.000 mensajes de simpatizantes al espacio. Luego lanzará una figura de acción de TENGA Robo junto con su socio Egg Dog en el espacio. Eventualmente regresarán a la Tierra, donde TENGA intentará recuperarlos. Finalmente, la empresa diseñó una versión especial de su TENGA Cup para acumular datos sobre las condiciones en el espacio.
La empresa tiene un objetivo bastante ambicioso: quiere ser el primero en crear un producto de masturbación que se pueda utilizar en el espacio. El dispositivo potencial podría estar equipado con un sistema de vacío que puede eliminar el lubricante y el semen del dispositivo, similar, en cierto modo, a la capacidad del inodoro espacial para eliminar y almacenar excrementos sólidos antes de que se desechen en la Tierra.
“El TENGA Rocket llevará mensajes de nuestros fanáticos y partidarios del proyecto al espacio; mensajes de ‘amor’ y ‘libertad’ de personas de todo el mundo, sin importar el país, la religión, la edad, el género o la sexualidad ”, dijo a IFLScience el presidente de TENGA, Koichi Matsumoto.
“Además de esto, desde que se fundó la empresa, he creído firmemente que eventualmente habrá una gran necesidad de TENGA en el espacio. La sexualidad y sus necesidades siempre son parte de nosotros, por lo que quiero aprovechar esta oportunidad, a través de mi encuentro casual con [el fundador de IST] Sr. Horie, como nuestro primer paso hacia el desarrollo de productos espaciales. Quizás algún día seremos capaces de crear algo que personas como la NASA quieran incorporar a sus esfuerzos en el espacio “.
El espacio y el sexo tienen una relación interesante y compleja. Ha habido muy poca discusión sobre la salud sexual en el espacio por parte de las agencias espaciales occidentales, y esto es preocupante. Es importante reconocer que la salud sexual es solo una parte de la salud humana, y si se espera que las personas pasen más y más tiempo fuera de la Tierra, ignorar la salud sexual no solo es absurdo, es peligroso.
IFLScience habló con la Dra. Eleanor Armstrong y Akvile Terminaite, respectivamente, investigadora y diseñadora de EXO-MOAN Studio. Destacan que los intentos de salvar la brecha cósmica entre el sexo y el espacio no son tan inauditos. Por ejemplo, ha habido ayudas para la masturbación espacial soviéticas, así como el traje 2 experimental, para ayudar a las personas a tener relaciones sexuales en el espacio.
“Esta nueva empresa de crowdfunding encaja dentro de una historia más larga de crowdfunding para el sexo en el espacio; por ejemplo, Pornhub, en 2015, lideró una campaña (sin éxito) de Indiegogo para hacer una cinta pornográfica en el espacio. Si bien las agencias espaciales estatales pueden no estar dispuestas a patrocinar contenido de ‘sexo’, tal vez el crowdfunding público que respalde misiones espaciales privadas (y tal vez se aparte de la carrera espacial multimillonaria) como esta podría ser una forma de incluir esto en la agenda “, los dos los expertos dijeron a IFLScience.
“Estamos realmente impresionados de que esto sea un Fleshlight, o un juguete sexual para penes, cuando gran parte de la industria de la tecnología sexual aquí en la Tierra se centra en los vibradores para vaginas y clítoris. Esto podría deberse a que a menudo se piensa que el espacio es ‘masculino’, militarizado (mapeado en hombres cis con penes), por lo que sería interesante si este fuera el primer juguete sexual exitoso diseñado específicamente para el espacio ”, Terminaite y el Dr. Armstrong dijo a IFLScience. Será interesante ver si esta misión cambia la relación entre el sexo y el espacio y cómo lo hace. Pronto podríamos confirmar si el cielo, para los juguetes sexuales, es realmente el límite.
Con información de IFL Science
