Heineken espera que la valentía holandesa tenga éxito donde el carácter temerario de los japoneses no lo logró. La cervecera está en conversaciones para comprar la división brasileña de Kirin, su gran rival cervecero japonés, y podría pagar 872 millones de dólares, según informaron los medios noticiosos de Japón.
Si el acuerdo se logra, la empresa tendrá cerca del 20 por ciento de la participación en el mercado, aunque estaría lejos de Anheuser-Busch InBev (AB InBev), la compañía estadounidense que domina en Brasil. Aunque sufrirán pérdidas, Heineken cree que podría hacerlo mejor.
En 2010, el gigante holandés de la cerveza se ganó un lugar en el mercado brasileño cuando compró Femsa, empresa dueña de las marcas Kaiser y Sol. En la actualidad es la tercera empresa dominante en ese país, con cerca del 10 por ciento de la participación de mercado, según una investigación de MarketLine. Anheuser-Busch InBev cuenta con un 70 por ciento.
Aunque Heineken no ofreció detalles sobre la manera en que está ingresando al país, Brasil ha sido un dolor de cabeza para las cerveceras. AB InBev comentó que, con el pasar de los años, el volumen de venta de cerveza ha disminuido un 4,1 por ciento en su tercer trimestre, porque las dificultades económicas de Brasil están afectando las ganancias de los consumidores.
Sin embargo, el enorme mercado cervecero de Brasil tendrá un valor cercano a los 60 mil millones de dólares en 2020, más que los 40 mil millones de 2015, según MarketLine. Heineken busca conquistar una gran porción de ese crecimiento.
La venta también podría convenirle a la empresa japonesa que está ansiosa por deshacerse de la inversión de 2011. Kirin pronostica tener pérdidas operativas durante todo el 2016, aunque será menor que en 2015.
Heineken tiene algunas ideas para lograr que la división vuelva a ser rentable. Se puede aspirar a algo luego del 38 por ciento del margen de ganancias que AB InBev obtuvo en el tercer trimestre —sin contar intereses, impuestos, depreciación y amortización—.
El grupo holandés podría recortar gastos operativos combinando las instalaciones de Kirin con la red de distribución y cervecerías que ya tiene en el país.
Además, el peso adicional del mercado así como un rival menos, podría aumentar el poder de la fijación de precios. Al posicionarse en este momento, Heineken puede obtener ganancias cuando Brasil se recupere.
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