Nicolás Maduro toma protesta de nuevo como presidente de Venezuela

El presidente venezolano, Nicolás Maduro, ha criticado a la Unión Europea y acusó a Washington de librar una “guerra mundial” imperialista contra su nación golpeada por la crisis, mientras rechazaba una tempestad de condena internacional para comenzar su segundo mandato.

Maduro, quien heredó la revolución bolivariana de Hugo Chávez después de su muerte en 2013, supervisó una calamitosa caída en la suerte de su país y fue reelegido en las elecciones disputadas en mayo pasado.

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Una lluvia de censura doméstica e internacional se reunió el jueves en el tribunal supremo de Caracas.

El secretario de Estado de los Estados Unidos, Mike Pompeo, condenó la “usurpación ilegítima de poder” de Nicolás Maduro y prometió “usar todo el peso del poder económico y diplomático de Estados Unidos para presionar por la restauración de la democracia venezolana”.

La Unión Europea calificó la votación del año pasado “ni libre, ni justa”, y dijo que Maduro estaba “comenzando un nuevo mandato sobre la base de elecciones no democráticas”.

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Los gobiernos de América Latina también denunciaron la inauguración, con Paraguay rompiendo relaciones diplomáticas y el presidente de Argentina, Mauricio Macri, calificando a Maduro como “el victimario que es víctima”.

“Venezuela está viviendo bajo una dictadura”, escribió Macri.

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Maduro desafió esos ataques durante un discurso de 80 minutos a compañeros chavistas y aliados izquierdistas internacionales, incluido el presidente nicaragüense, Daniel Ortega, Evo Morales de Bolivia y Miguel Díaz-Canel de Cuba.

“Somos una democracia verdadera, profunda, popular y revolucionaria … no una democracia de las élites … de super-millonarios que llegan al poder para enriquecer a su grupo económico y para robar a la gente”, afirmó. “Y yo, Nicolás Maduro Moros, soy un presidente genuinamente y profundamente democrático”.

Con información de The Guardian