La patrulla fronteriza de los EEUU recibió con balas de goma y bombas de gas lacrimógeno a los migrantes que intentaron cruzar la frontera. La mañana de este domingo, unos 500 miembros de la caravana migrante intentaron forzar su paso a través de distintos puntos de la frontera.
Los migrantes en cuestión marcharon desde la unidad deportiva Benito Juárez –donde está ubicado el albergue que ha recibido a los migrantes centroamericanos– hasta la garita de San Ysidro, esquivando a su paso el cerco que la Policía Federal había instalado para proteger el puerto de entrada.
“Lo que está pasando ahorita, es un total desorden. Las personas que vienen no saben si pueden o no cruzar. Es importante que haya control. Me da miedo que haya un incidente, que alguien tire una piedra y comiencen los disparos”, afirmó Enrique Morones, fundador de la asociaciónÁngeles de la Frontera.
Incluso algunos migrantes salieron con lesiones por las balas de goma; no obstantes, mientras algunos buscan tranquilizar a algunos migrantes, hay quienes lanzan consignas en contra de las autoridades estadunidense y hasta los agraden.